Mi padre siempre fue una persona humilde y honesta, no le gustaba fardar de su estatus de jugador de fútbol profesional, de hecho, cuando se presentaba a gente nueva decía que trabajaba de utillero. Muestra de esa humildad son estas botas, siempre usaba el mismo modelo, y creo que uso dos o tres pares en toda su carrera. Mi padre estaba muy alejado de lo que se entiende ahora por jugador de futbol, un caballero.