Marino, mi ídolo

Aquí podemos ver un fragmento que le dedicó la Colección Ídolos del deporte. Me hace gracia porque se refieren a él como un posible Garrincha a la madrileña, el Garrincha de Chamberí. No sé si llegó a leerlo en su día, pero a día de hoy le hace mucha gracia verlo. Él nunca se ha dado aires de grandeza, ni si quiera me ha contado nunca que había sido jugador, y que lo compararon con alguien como Garrincha le parece algo de otro mundo. Pero ahí queda para la historia esa comparación. 



Pasión por el fútbol

Desde niño, mi padre vivió y respiró fútbol. En su juventud, jugó en campos polvorientos y bajo el sol abrasador, pero siempre con una sonrisa en el rostro. La pasión por el deporte lo acompañó hasta el final, y esa misma pasión es la que llevo en mi corazón en su honor.



Recortes del pasado

Hay pocos recuerdos de su primera etapa en el juvenil del club, pero encontré este recorte de un As de 1965 en el que se menciona brevemente su nombre como un jugador de banda que sorprende por su velocidad.